Ecuador: Los policías sublevados se justifican

“Por culpa de los recortes no pudimos hacer un golpe como la gente”

El grupo de policías que llevó adelante la revuelta contra el presidente ecuatoriano Rafael Correa manifestó su profunda preocupación por no contar con los recursos suficientes para poder realizar un derrocamiento “como Dios manda”. Uno de los líderes policías-rebeldes declaró desde el anonimato que: -“si el gobierno nos sigue soltando la mano vamos a vernos obligados a buscar financiamiento externo como en las épocas que a nadie le gusta recordar. Que no se crea Correa que no seguimos recibiendo ofertas de EE.UU. para cubrir todos los gastos necesarios, lo que pasa es que nos hubiera gustado hacer un golpe 100 % nacional, pero con este presupuesto es imposible”. Además agregó que varios argumentos más para convalidar su reclamo que consideró legítimo y resumió en la frase “protestamos para que nadie proteste”, haciendo referencia a la necesidad de mejoras para que puedan reprimir y someter el resto de las protestas de la población que no son legítimas. El reciente fracaso sacó a relucir el grave problema de ingresos en las fuerzas policiales que no solamente no pudieron concretar el golpe por falta de inversión, sino que de continuar tan intransigente Correa probablemente empiecen a escasear hasta las balas para matar subversivos, delincuentes y portadores de caras sospechosas. Un panorama por lo menos preocupante.




Los guardaespaldas de Correa declaran cierta disconformidad con sus dichos: “Si vuelve a pedir que le tiren le tiramos nosotros por pelotudo”

“Todo bien, nosotros juramos lealtad y si nos tenemos que poner delante de una bala lo hacemos, pero tampoco la boludez de andar provocando así”, dijo uno de los guardaespaldas del mandatario de Ecuador. Al parecer, ni a ellos ni a sus familias les habría resultado una gran idea cuando el presidente pidió que le disparen. “La próxima vez que salga con una jodita así, lo cagamos a tiros nosotros”, concluyó otro guardaespaldas claramente enojado.



Luego de haberse internado en hospital de la policía, Correa decidió ir a pedir un préstamo a EEUU con una remera que diga “I love Bin Laden”.

Más de una voz se ha alzado para resaltar cierta incoherencia en algunas medidas del presidente ecuatoriano. Después de haberse internado en el hospital del mismo grupo que lo había agredido, también habría mantenido la línea en otras iniciativas que muchos encuentran desacertadas. Entre ellas está la de ir a “la 12” con la camiseta de river, a una sinagoga con un brazalete de la SS, visitar a Fidel usando una remera de Mickey Mouse y mezclar sandía con vino.