El Gran General les puso todas las facilidades para que lleguen y una vez acá los alojó en el hotel de inmigrantes, para después echarlos como animales y tirarlos en la frontera con Bolivia, donde un capanga les dijo: "Ahí tienen la tierra que querían, indios de mierda".
Hoy los Qom, reprimidos, asesinados y saqueados en la provincia del kirchnerista Insfrán, son ninguneados por mucho tiempo, luego amenazados de muerte y obligados a volver, con excepción de su líder, al que sientan en una mesa de supuesto diálogo, integrada por todos oficialistas. Gran progreso...
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