Si bien sabemos que Ramiro es un tipo muy humilde y de perfil bajo, pudo trascender que su agencia “Fresca” sería la responsable de la nueva campaña de cara (estirada) a las próximas elecciones presidenciales. Luego de pedirnos “off the record” que le preguntáramos sobre esta cuestión, una vez encendida la cámara nos dijo:- “No me gusta hablar de eso, solamente me pareció que podía hacer algo. Con todas mis cuentas bancarias, islas e incontables premios, hay veces que me siento vacío y necesito un desafío nuevo. Fue ahí que me enteré de lo de Lucho (por Arruga) y puse toda mi creatividad, “top of mind” a su servicio. No cobré ni un peso. Descarté proyectos millonarios, pero valió la pena. Ahora nadie puede discutir que no hay nada que mi agencia no pueda hacer”. Ramiro nos explicó que la idea era muy simple, aunque quizás haya que “rumiarla un rato”. Se trata de mejorar la imagen de nuestra mandataria en dos frentes simultán


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